ALGUIEN PATEO EL HORMIGUERO.............

ALGUIEN PATEO EL HORMIGUERO............
de Raul Ludueña

Alguien pateó el hormiguero. La cosa estaba organizada y las hormigas venían una tras otras siguiendo un camino sinuoso pero en perfecto orden.
El monopolio los había agasajado con algo para comer, la presencia del mandamás y algunos retos. Ellos salieron con la alegría que sienten los niños cuando se les regala una golosina, los reconocían y les daban las directivas, algo impensado para quien se sabe mediocre y sin futuro.
Creyeron que bastarían unas “tapas” de Clarín, algun que otro desorden promovido por activista de cuarta, y algunas declaraciones que el diario se encargaría de amplificar para desestabilizar el gobierno de la reciente viuda.
Primero descorcharon Champagn festejando la muerte de Nestor, mas tarde propusieron un gobierno de coalición hasta las nuevas y anticipadas elecciones ya que la “señora” no podría seguir manejando los destinos de nuestro país.
Se la quiso comparar con Isabelita, se le inventaron depresiones, entornos maléficos, incapacidad y todo el arsenal de idioteces que son capaces de inventar los imbéciles.
Hubieron presidenciables como nunca en democracia, todos se sintieron capaces de tomar la posta y conducir, sólo hacía falta seguir las órdenes del amo: El señor Magnetto, el dueño del monopolio, el dueño de todos.
Primero quiso tomar las banderas del retroceso el infaltable Duhalde, amenazó con un nocaut, armaron el llamado peronismo disidente, en realidad, decadente. Se sumó Solá, Das Neves, Rodriguez Saa, lo empujaron a Reuteman pero se le había terminado la nafta. Estaban rostros decadentes como Miguel A. Toma, Romero, y una banda deshilachada y si rumbo.La interna para elegir un presidenciable estaba colmada.
Pasaba lo mismo con los radicales, Alfonsín destilaba optimismo, Cobos se hacía la figurita difícil y pretendía ser el eje del rejunte de fracasados. Se sumó Sanz, y todo era fiesta.
Por el lado de los inorgánicos estaban Carrio, feliz como ninguno creyendo que una de sus profecías se cumplía, “se vienen dias difíciles, pero yo voy a estar”, había declarado una vez mas sin reparar que nadie jamás pensó en ella en caso de descontrol.
Pino se sintió aglutinante de los sectores de la derecha de izquierda, o la izquierda de derecha, lo mismo da.
El amo fue"inventando" candidatos, la órden era rejuntarlos de cualquier manera y la apuesta de maxima , sacar a Cristina del gobierno.
Ninguno se preocupo en hacer propuestas, siguiendo el derrotero del multumedio se ocuparon de criticar medidas que en muchos casos fueron banderas de muchos de ellos.
El primer cachetazo lo sintieron en Catamarca, descontaban un triunfo rotundo y hacia alli partieron Cobos y Sanz, pintaba para fiesta y volvieron con la cola entre las patas.
Los decadentes prepararon la fanfarria el Chubut, el "modelo" prometía un paseo. El regreso fue de noche y a escondidas, fraude mediante.
Quisieron esconder el aplastante triunfo de Urtubey haciéndolo parecer como algo lejano del kirchnerismo, fue el propio gobernador el encargado de poner las cosas en su lugar, " este triunfo se dio en gran medida por los aportes de Cristina a quien apoyaremos si se decide a ser reelecta" , dijo. Jaque mate.
Cunde el pánico, abandonan la contienda antes de empezar. Das neves es un recuerdo vergonzoso, Reuteman nunca se subió, Duhalde se ofrece como aglutinador desde una internita que no junta ni a los vecinos de las escuelas, Pino piensa en la ciudad, Sanz lo dejó sólo a Alfonsín que no pudo ni brindar con coca, Cobos piensa en una diputación , quiere ser el primer radical en terminar un mandato, avergonzó a propios y ajenos.
Abusando de la caradurez de Maurissio, el imperio mediático lo manda a repetir la absurda estrategia del pequeño hombrecito llamado Duhalde: rejuntar a los cadaveres políticos y armar un frente sin ideas, con un sólo objetivo, ganarle a Cristina en octubre. Es evidente que no se trata de confrontar programas, políticas de estado, modelos de crecimiento y todas esas estupideces que son importantes para la tiranía y sus fanáticos.
Se van quedando sólos, sienten que el final se acerca y el pueblo les dió la espalda. Apostaron al multimedio por sobre sus convicciones y hoy se ven desparramados y confundidos buscando el hormiguero.
De este lado, el de la gente, millones pensamos que "solo al pueblo salvará al pueblo" , las palabras de Perón replican como campanadas en los oídos de quienes nos sentimos sus herederos.
Hoy Cristina levanta esas banderas para llevarnos hasta victoria.....Siempre