LOS CINCO JUECES CIEGOS

LOS CINCO JUECES CIEGOS.
Raul Ludueña

Se están preparando. Son cinco jueces cuestionados por sus malos antecedentes y una mescolanza de políticos fracasados junto a nostálgicos de la dictadura. Se le suman burócratas sindicales, parte de la curia conservadora, sectores agrarios que evaden millones y detestan las retenciones. La fauna será variada y los carteles versarán sobre un asesinato que la justicia no probó pero que los medios dominantes ya decretaron infectando miles de mentes ansiosas porque así sea, incluyendo la culpabilidad del gobierno, como el manual destituyente lo indica.
La embestida viene creciendo en intensidad a medida que se acerca la fecha, es un ataque preventivo ante la posibilidad cierta que el FPV gane las elecciones, los opositores no se destacan por sus propuestas o por su seriedad.
El disparador fue el suicidio de un fiscal. Había fracasado el diciembre"negro" tan promocionado, las playas explotan de gente, el consumo va en aumento y una inflación en descenso tensa la cuerda, impacientando a los sectores más reaccionarios que auguraban un verano con el dólar a 20 pesos.
Fueron dos disparos, uno en la cabeza del fiscal que anuncia con pompas una acusación absurda; el otro al corazón de una sociedad apacible que disfruta de los días veraniegos agotando plazas hoteleras.
Son cinco jueces ciegos, jueces cuestionados que extrañamente convocan a una marcha pidiendo lo que ellos deben brindar; justicia.
Los ciega la posibilidad de una reestructuración que purifique a una familia infectada; la familia judicial. Los ciega el apego a las políticas conservadoras que este gobierno desterró; los ciega la oferta electoral que muchos de ellos reciben de una oposición pegoteada, a las órdenes de oscuros poderes; los ciega las centenares de causas cajonadas porque tocan intereses de los dueños del dinero evadido en paraísos fiscales o el robo de empresas de parte de monopolios corruptos.
Se estan preparando, son los ciegos que solamente ven sus intereses sin importarles las necesidades del pueblo.
Si tienen suerte recibirán los saludos de los buitre que esperan picotear lo que les prometieron y este gobierno les niega. Los saludarán desde las páginas del multimedios que espera a los derogadores para seguir sumando poder a su imperio editorial. Los saludarán los sectores reaccionarios que destilan odio y ponzoña al son de las cacerolas.
Tal vez las cosas no salgan como esperan y tanta ansiedad se vea frustrada. De todos modos la guerra está declarada más allá de una marcha.
Hoy son cinco jueces ciegos las caras visibles, luego veremos.
Los pueblos suelen hacer tronar el escarmiento cuando agotan su paciencia.